Una elección que marca la independencia política de Misiones

Fundamentos y objetivos para un gobierno provincial que desafía a la Patria Porteña.

Misiones se encuentra en una situación sanitaria, económica y social mucho mejor que el resto del país. La gente se está vacunando, los hospitales atienden, las escuelas, los restaurantes y los comercios abiertos, las restricciones son mínimas, la industria y la producción están a pleno, se genera empleo y se ayuda a todos los sectores que necesitan asistencia por la pandemia. Todo esto no es casualidad, es producto de un trabajo planificado, pensado y ejecutado con mucha dedicación y mucha preocupación por parte del Gobierno provincial, los intendentes, los concejales y los diputados.

A nivel nacional y en las grandes ciudades de otras provincias la realidad es totalmente diferente, y el ejemplo principal es Buenos Aires y CABA. Cada vez más restricciones, desempleo, discusiones políticas entre políticos que no aportan ninguna solución a la gente, escuelas, hospitales y comercios cerrados, causando desempleo. La macro economía, que depende del gobierno nacional, tampoco tiene ningún tipo de control, la inflación, el dólar, el precio del combustible, etc.

Es necesario reflexionar acerca del voto de este domingo, pensar qué es lo más conveniente para Misiones: seguir por el camino del cuidado, del trabajo, de la planificación, de los hospitales, de las obras, el asfalto; o cambiar hacia alguno de los dos modelos que ya mostraron su capacidad de gestión en la Nación. Es necesario que la sociedad apoye, y así va a ocurrir, lo que está bien hecho, que apoye a los dirigentes políticos que trabajaron y se preocuparon por la gente. El único premio del político es tener a la gente conforme y recibir la confianza mediante el voto.

Misiones merece tener un gobierno con autonomía, con criterio propio, con gestión transparente y de puertas abiertas para todos, que solo obedece al mandato y al interés de los misioneros, sin pensar caerle bien a los poderes centrales de Buenos Aires, que siempre se olvidaron de la provincia y están en deuda: los dos modelos que constituyen la grieta están en deuda con Misiones y ninguno de sus representantes locales trabaja para que esa deuda se salde.

El esfuerzo del gobierno, del gobernador Oscar Herrera Ahuad, del intendente de Posadas “Lalo Stelatto, merece el apoyo de la gente con el voto.

Misiones es vista como una provincia ejemplar en modernidad, innovación y manejo de la pandemia, a pesar de tener menos recursos económicos que el resto de las provincias y tener la coparticipación per cápita más baja del país.

Bien vale un nuevo voto de confianza.

Por Zorba El Griego