La conjura de los débiles

Las elecciones provinciales parecen estar ya definidas: ¿Juntos por el Cambio juega a perder?

La candidatura a gobernador de Martín Arjol fue un error táctico que ya lo está pagando con la caída del 50% de los sublemas.

Desde las filas de la UCR es evidente que un sector juega a que el diputado nacional sufra una derrota vergonzosa y así desmoralizarlo para futuras aspiraciones políticas.

Por otro lado, Pepe Pianesi podría bajarse de su candidatura a senador nacional y avanzar en un acuerdo de gobernabilidad con la Renovación para evitar el éxodo constante de militantes y dirigentes juveniles al misionerismo.

El gobernador de Corrientes Gustavo Valdés financia la campaña electoral, pero hasta ahora no aparecen los 50 millones de pesos que dicen desde su entorno haberle bajado a Martín Arjol y a los clanes radicales de Posadas.

En el PRO las cosas parecen estar más tranquilas a partir de que Humberto Schiavoni confirmó que no va por su reelección a senador nacional. La candidata a vicegobernadora Natalia Dörper irradia inocencia e ignora cuál es su rol en la trama macrista de la tierra colorada. Jorge Ratier Berrondo cerca de dar un portazo. Alfredo Schiavoni y Martín Goerling acuerdan una tregua.

A saber, si Mauricio Macri es candidato a presidente el escenario interno de Juntos por el Cambio en Misiones de cara a las elecciones nacionales sufrirá una metamorfosis. Ramón y Pedro Puerta abonan esa teoría.

La UCR sufre la ausencia de liderazgo y el PRO es una mutual que la manejan cuatro familias.

Juntos por el Cambio no tiene destino, o peor aún, no le interesa llegar algún día a ser gobierno, es muy cómodo el rol de jugar a ser oposición y “lobbysta” de los correntinos y porteños.

Continuará…

Por Zorba El Griego