Una vez que se oficialice la salida de Mauricio Macri de la presidencia, los movimientos al interior de la coalición Juntos por el Cambio quedarán expuestos. Es por esto que los principales dirigentes del PRO ya trabajan en la contención de las filas del partido donde el presidente mandato cumplido ya avisó que continuará al frente de la fuerza política.
En la vuelta al llano Mauricio empieza a delinear a la tropa propia y para eso nada mejor que empezar por casa. Así se definió que la nueva presidenta del partido PRO sea la saliente ministra de Seguridad Patricia Bullrich, esta decisión se da para suplantar al misionero Humberto Schiavoni que continuará en el Senado.
Uno de los nombres que había sonado para el cargo fue Diego Santilli pero el vicejefe de Gobierno porteño prefiere concentrarse en la proyección nacional de Larreta. Además consideran que elegir a un funcionario porteño de perfil alto en el máximo escalafón partidario sería un blanco fácil del próximo oficialismo.
Según relató el diario Clarín a Horacio Rodríguez Larreta no le desagrada ya que guarda relación con la ministra por varios términos de seguridad. “Es normal que el PRO, que terminó a la derecha, lo presida Patricia. Nosotros estamos más en el centro”, razonan en el gabinete porteño.
El que no tiene discusión en la conducción del partido a nivel bonaerense es Jorge Macri quien continuará al frente de la fuerza en la provincia pero también se apoyará en los intendentes que mantuvieron territorio, el platense Julio Garro, el lanusense Néstor Grindetti y el mandatario de Tres de Febrero Diego Valenzuela.
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